¿Por qué optar por los TRATAMIENTOS ANTI-EDAD?
“Empezar por las cosas bellas de este mundo, de los cuerpos bellos a las bellas normas de conducta y de las normas de conducta a los bellos conocimientos.” Platón
El deseo de ser más joven y atractivo se ha manifestado desde la antigüedad. En todas las épocas y en diversas civilizaciones el ser humano buscó medios como el maquillaje y el vestuario para cuidar su apariencia, buscando siempre la manera de detener los rastros del paso del tiempo en su cuerpo o disimular los signos del envejecimiento.
La Historia muestra que la Cosmetología fue realmente la pionera y precursora del Envejecimiento Saludable. Pintores paleolíticos en la Prehistoria, Cosmética y Aseo en la Antigüedad, el ideal femenino, cuidados de belleza y depilación en Egipto, cuidados higiénicos y estéticos en Medio Oriente, avances en la higiene y la cosmetología en Grecia y los baños romanos precursores del SPA en Roma.
La medicina no quedó indiferente. Hipócrates, el padre de la Medicina, propuso reglas higiénicas. Galeno, considerado como el precursor del concepto de la Medicina Antienvejecimiento, iluminó al mundo con sus hipótesis y fue seguido por decenas de Métodos para la longevidad: Plantas y animales fueron utilizados como rejuvenecedores y proliferaron enfoques científicos sobre la longevidad como los de Metchnikoff, Brown-Sequard, Voronoff, Niehans, Ana Aslan, D. Hartmann, Hartman y Hayflick, Roy Walford y Richard Weindruch, Zs-Nagy.
Estos pioneros e investigadores fueron seguidos por otros que preferían prevenir a curar y que pasaron de la Medicina Curativa a la Medicina Preventiva diluyendo así los límites entre la prevención y la curación.
La Cosmiatría cuenta hoy con múltiples recursos para prevenir el envejecimiento y ayudar a los pacientes a envejecer saludable y dignamente. La combinación de métodos de tratamiento con productos químicos cosméticos, aparatología, masoterapia, electro-físicos y por supuesto intervenciones manuales como PEELING y verbales recomendando mejorando hábitos de vida en relacion al agua, el sol, el tabaco, la actividad física, el alcohol etc.probaron ser beneficiosos para combatir los diferentes signos del envejecimiento y prevenir de hecho el envejecimiento.
Las estrategias contra el envejecimiento son utilizadas por equipos multidisciplinarios integrados por diversas profesiones, entre ellos médicos, nutricionistas, profesores de educación física y cosmiatras, hasta científicos, que utilizan Dietas y Suplementos, Intervenciones Cosméticas, Implantes en la piel, Cirugía, Tratamientos Hormonales, Clonación, sustitución de partes del cuerpo, Criogenización,“Copiar” la mente (Mind uploading) – transferencia de la mente-conciencia humana a un ordenador, hasta la Nanomedicina, tecnología hipotética con nanorobots para reparar células en vivo que podrían revertir daños causado por el envejecimiento a nivel molecular.
El envejecimiento es más que arrugas
Existen dos tipos de envejecimiento
1. Interno: o proceso de envejecimiento natural que comienza alrededor de los 25 años con la pérdida de colágeno y elastina y se observa años después.
2. Externo: causado por factores ambientales que aceleran el proceso.
El Antienvejecimiento, que tuviera sus orígenes en la Cosmetología, se apoya hoy en la Medicina y Cirugía Estética, la Dermatología y la Cosmiatria. A estas disciplinas se le sumaron los conocimientos de la Medicina Preventiva, Geriatría y Psiquiatría y se pasó del campo de la estética a la salud integral, mejorando así la imagen corporal e integral.
Ejemplo de Tratamiento ANTI -AGING:
El objetivo de este tratamiento es reafirmar la piel y realzar el contorno facial.
Sabemos que la firmeza de la piel depende de la genética del individuo, el tono muscular y el estado del tejido conectivo. Enfocaremos nuestros tratamientos en los dos puntos que podemos modificar:
1.- Trabajar el tono muscular con la aparatología o los ejercicios indicados
2- Trabajar sobre el tejido conectivo, estimulando la micro circulación y el metabolismo celular en la capa basal, para que se produzcan nuevas fibras de colágeno y elastina, y ácido hialurónico. Protegeremos ese tejido de sostén con aporte de antioxidantes, reforzaremos la barrera lipídica y los mecanismos de retención de agua que otorgan turgencia a la piel.
Gracias a REVISTA ÓPTIMA por la info.
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